Hablemos sobre sentimientos: Hoy, la vergüenza y cómo la piloteamos
¡Con esta canción de Esteman no hay como sentir vergüenza a la hora de bailar!. Te mueves como puedas y lo sacas todo afuera.
Le pedimos a los profesionales en salud mental de la Corporación Escuela Nacional del Grito, que nos construyeran una guía para pilotear lo que nos pasa en el día a día. Unos artículos cortos que sean fáciles de entender y que puedas compartir con los tuyos.
En este Volumen 11, visitaremos el quinto sentimiento de la lista: la vergüenza. ¿Cuánto hemos dejado de hacer porque arriesgarnos a dar el primer paso nos da pena?. Hoy atenderemos el llamado de Esteman y bailaremos toda la noche para sacudirnos la vergüenza.
Conoce todo sobre la Guía para pilotear lo que siento.
¿Qué es la vergüenza?
Es una emoción y se da cuando nos valoramos negativamente, sintiendo miedo a ser juzgados por los demás. Esto nos lleva a escondernos y ocultar nuestras fallas para evitar opiniones que consideramos desfavorables.
La mejor manera de enfrentar la vergüenza es fortaleciendo nuestra autoestima, aceptar el error como parte de los procesos y reconocernos cada logro por más pequeño que lo consideremos, es el inicio para fortalecer la confianza en nosotros mismos.
Una vez aceptamos y comprendemos que cada uno de nosotros habita un ritmo diferente, poco a poco empieza a desaparecer el miedo a la aceptación y validación del otro.
Asumir quienes somos nos motiva a presentarnos ante la vida de una manera más genuina y menos forzada. Soltar el miedo a mostrarnos ante el mundo, nos permite exponernos ante el otro sin que esto se convierta en tragedia y logra que compartamos nuestro propio ritmo con soltura.
Cuando te subes a una tarima tienes muchos ojos viéndote. Puedes sentir vergüenza de atreverte, pero una vez empiezas a respirar y te enfocas en eso todo cambia.
¿Cómo pilotear la vergüenza?
- Cuando te sientas avergonzado, tómate un momento para respirar profundamente. Esto puede ayudarte a calmarte y aclarar tu mente.
- Aprende a aceptarte a ti mismo tal como eres, con todas tus peculiaridades. Cuanto más te aceptes a ti mismo menos cosas te van a avergonzar.
- Aprende a reírte de tus propios errores y peculiaridades. TODOS cometemos errores y tenemos imperfecciones, y eso está bien. Acepta que eres humano y ríete de tus momentos torpes o divertidos.
- En lugar de ver tus fallas como algo vergonzoso, trata de encontrar el lado gracioso de la situación. A menudo, las situaciones embarazosas pueden convertirse en historias divertidas para contar más adelante.
- Intenta ver la situación desde una perspectiva diferente. A menudo, lo que parece embarazoso en el momento puede no ser tan importante a largo plazo. Trata de enfocarte en las lecciones aprendidas en lugar de en la vergüenza.
- Habla con alguien de confianza sobre cómo te sientes. Ya sea un amigo cercano, un familiar o alguien de confianza, compartir tus sentimientos puede ayudarte a sentirte menos solo en tu experiencia.
Si en algún momento sientes que la vergüenza te impide lograr lo que quieres, así sea algo pequeño, usa el Grito de Ayuda para que un profesional de la salud mental te acompañe a procesar este sentimiento.
¿Por qué gritamos a través del arte?
En nuestros festival conversamos con Daniel “El Panda” sobre la comedia y la salud mental. Entre otras cosas mencionó lo importante que es reírse de sí mismo para procesar distinto momentos vergonzosos o difíciles.
En la Escuela Nacional del Grito creemos que el arte es una herramienta sanadora que nos permite sacar eso que llevamos dentro a través del baile, las rimas, la escritura, entre otros. Por eso, hacemos talleres y charlas de manejo de emociones que contribuyen a tu salud mental para que cada vez conozcas mejor eso que estás sintiendo.
Si haces parte de alguna organización y quieres que acompañemos algún ejercicio para aprender a transitar por las emociones, contáctanos.