
El viernes 11 de octubre de 2024, experimentamos un Taller de arte y emoción en Puerto Berrío Antioquia con la Escuela Nacional del Grito.
A través de las manualidades y la construcción de un «Ojo de dios» con hilos de colores, realizamos una reflexión junto a nuestros participantes sobre el amor, los límites sanos y las relaciones con otros.
Como en la cultura Huichol, cada color significa algo, en el caso de ese pueblo, representan la vida, la fuerza, el sol, el agua y la pureza; para nosotros cada hebra de hilo significará un tipo de amor en específico: el amor propio, el de la familia, los amigos y el amor romántico. Un espacio para reflexionar sobre los límites.
Fue así como gracias a Comfama, nos encontramos con mujeres de Puerto Berrío para vivir una tarde de conversaciones profundas y mucha complicidad en la Ciudadela Educativa y Cultural América.
Este tipo de articulaciones con aliados, le permiten a la Escuela aumentar su visibilidad en los territorios, probar sus contenidos con otros grupos poblacionales, conocer nuevos lugares del país y sobre todo, llevar las herramientas de autocuidado y bienestar desde el arte a todo Colombia, uno de nuestros principales objetivos como Corporación.
Conoce más sobre nuestros talleres y lo que hace la Escuela Nacional del Grito acá
¿Qué pasa en nuestro taller de Quereme mucho pero quereme bien?
Nuestro taller es una experiencia significativa porque propicia un medio desde el arte para explorar sentimientos complejos como el amor, genera reflexiones que nos llevan al autoconocimiento e incluso permite entender un poco más sobre cómo me vinculo con otros en el día a día.
Además el taller de Quereme mucho pero quereme bien, también está diseñado para aprender de amor propio, aportando en procesos de sanación y transformación para los participantes.
Todo esto ocurre en un ambiente seguro y de intercambio. En el que se vive una contrucción personal, sin perder la posibilidad del diálogo con otros sobre los temas que están sobre la mesa. Además las actividades que involucran la creación de objetos con las manos, refuerzan habilidades cognitivas, reducen el estrés y fortalecen la expresión emocional.